Un brote psicótico es una experiencia compleja y desafiante, tanto para quien lo experimenta como para quienes lo rodean. Este episodio se caracteriza por una desconexión parcial o total de la realidad, afectando el comportamiento, los pensamientos y las emociones de una persona. Identificar los síntomas de un brote psicótico a tiempo es crucial para buscar ayuda profesional y garantizar un manejo adecuado de la situación. En este artículo, desde Espai Nun, equipo de psicólogos en Terrassa, hablamos con detalle sobre qué es un brote psicótico, cuáles son sus principales síntomas y cómo actuar ante esta situación.
¿Qué se considera un brote psicótico?
Un brote psicótico es un episodio temporal en el que una persona pierde el contacto con la realidad. Durante este estado, puede experimentar alucinaciones, delirios y pensamientos desorganizados, lo que dificulta su capacidad para diferenciar entre lo que es real y lo que no. Este fenómeno puede aparecer de manera repentina y suele estar asociado con trastornos mentales como la esquizofrenia, el trastorno bipolar o el consumo de sustancias psicoactivas.
Es importante destacar que un brote psicótico no define a una persona ni su estado mental a largo plazo. Es un evento que puede ser tratado y gestionado con el apoyo adecuado. Muchas personas que experimentan un brote psicótico logran recuperarse completamente cuando reciben la atención necesaria.
Estos son los síntomas principales de un brote psicótico
Alucinaciones
Las alucinaciones son uno de los síntomas más característicos de un brote psicótico. Se trata de percepciones sensoriales que no tienen base en la realidad, como escuchar voces, ver figuras o sentir sensaciones físicas inexistentes. Por ejemplo, una persona puede escuchar a alguien llamándola cuando está sola, o puede sentir que algo le toca la piel sin que haya contacto físico.
Este síntoma puede ser aterrador, ya que las alucinaciones suelen parecer extremadamente reales para quien las experimenta. Las alucinaciones auditivas son las más comunes, pero también pueden ser visuales, táctiles, gustativas u olfativas. Entender este síntoma es clave para empatizar con la experiencia de la persona afectada.
Delirios
Los delirios son creencias falsas o irracionales que la persona mantiene firmemente, incluso cuando existen pruebas que las contradicen. Un ejemplo típico es el delirio de persecución, donde la persona cree que está siendo vigilada o amenazada por alguien. Otros delirios pueden incluir ideas de grandeza, como pensar que se tiene un poder sobrenatural o un conocimiento especial.
Este síntoma afecta profundamente la manera en que la persona interpreta su entorno. Es importante no desafiar directamente sus creencias durante un brote, ya que esto puede intensificar su confusión y malestar. En lugar de ello, se recomienda escuchar con paciencia y buscar ayuda profesional.
Pensamientos desorganizados
La desorganización del pensamiento es un síntoma que se manifiesta a través de un discurso incoherente o difícil de seguir. La persona puede saltar de un tema a otro sin conexión lógica, utilizar palabras inventadas o mezclar ideas sin sentido aparente.
Este síntoma puede generar frustración tanto en la persona afectada como en quienes intentan comunicarse con ella. Es importante ofrecerle tiempo y espacio para expresarse, ya que forzar la coherencia en la conversación puede aumentar su estrés.
Cambios drásticos en el comportamiento
Durante un brote psicótico, es común observar comportamientos extremos o inusuales. La persona puede actuar de manera agresiva, mostrarse completamente pasiva o realizar acciones fuera de contexto, como hablar sola en voz alta o gesticular de forma exagerada.
Estos cambios de conducta están relacionados con la pérdida de contacto con la realidad y, en muchos casos, con el miedo que genera la experiencia psicótica. Es crucial abordar estos comportamientos con calma, evitando reacciones que puedan aumentar la tensión.
Falta de conciencia de la realidad (Pérdida de insight)
Uno de los aspectos más desafiantes de un brote psicótico es que la persona no suele ser consciente de su estado. Esta falta de insight significa que no reconoce que lo que está experimentando no es real, lo que dificulta que busque ayuda por iniciativa propia.
Este síntoma puede ser frustrante para los familiares y amigos, pero es esencial recordar que no se trata de una falta de voluntad, sino de una característica del brote. Proporcionar apoyo y buscar atención profesional es clave en estos casos.
Ansiedad y agitación
La ansiedad intensa y la agitación son respuestas comunes al miedo y la confusión que genera un brote psicótico. La persona puede mostrarse inquieta, caminar de un lado a otro o reaccionar de forma impulsiva ante estímulos que percibe como amenazantes.
Este estado puede escalar rápidamente si no se maneja con cuidado. Un ambiente tranquilo y la comunicación serena pueden ayudar a reducir esta agitación, ofreciendo un mayor sentido de seguridad.
Alteraciones en el sueño y el apetito
Las personas que experimentan un brote psicótico suelen mostrar cambios significativos en sus patrones de sueño y alimentación. El insomnio prolongado, las pesadillas recurrentes o una pérdida total de interés por la comida son señales de alerta importantes.
Estas alteraciones no solo agravan el estado físico de la persona, sino que también afectan su capacidad para manejar el estrés y las emociones. Reestablecer rutinas básicas es un paso fundamental en el tratamiento posterior.
Aislamiento social
Durante un brote psicótico, es común que la persona evite el contacto con los demás. Este aislamiento puede deberse al miedo, la confusión o la sensación de que nadie la comprende.
El aislamiento social puede prolongar el episodio y empeorar el estado emocional de la persona. Mantener una conexión cercana y empática con ella puede ser crucial para ayudarla a sentirse apoyada y acompañada.
Dificultades para diferenciar lo real de lo imaginario
La característica central de un brote psicótico es la incapacidad de distinguir entre la realidad y las percepciones alteradas. Esto afecta la forma en que la persona interpreta su entorno y a las personas a su alrededor. Este síntoma puede llevar a decisiones impulsivas o comportamientos riesgosos. Proporcionar un entorno seguro y buscar ayuda médica son acciones esenciales para manejar este tipo de situación.
¿Brote psicótico o ataque de ansiedad?
Aunque ambos pueden compartir algunos síntomas, como la sensación de desconexión y la agitación, son condiciones completamente diferentes. Un ataque de ansiedad está relacionado con un miedo intenso pero breve, mientras que un brote psicótico implica una pérdida de contacto con la realidad que puede prolongarse durante días o semanas. Reconocer la diferencia es crucial para determinar el tratamiento adecuado.
¿Qué hacer en caso de que experimentes un brote psicótico?
En primer lugar, es fundamental buscar ayuda profesional de inmediato. Contactar a un psicólogo o psiquiatra especializado puede marcar la diferencia en la recuperación. Si el brote es severo, acudir a un servicio de urgencias puede ser necesario para garantizar la seguridad de la persona afectada y quienes la rodean.
Mientras esperas ayuda, es importante mantener la calma y crear un ambiente seguro y tranquilo. Evita confrontaciones, ya que esto puede agravar la situación. Habla con un tono suave y asegúrate de que la persona se sienta escuchada y respetada.
Finalmente, una vez superado el episodio, es vital seguir un tratamiento continuo que incluya terapia y, en algunos casos, medicación. Esto no solo ayudará a prevenir futuros episodios, sino también a mejorar la calidad de vida del paciente a largo plazo.
En Espai Nun, ponemos a tu disposición a los mejores profesionales
En Espai Nun, contamos con un equipo de psicólogos especializados en salud mental que están aquí para ofrecerte el apoyo que necesitas. Sabemos lo difícil que puede ser enfrentarse a un brote psicótico, tanto para quien lo experimenta como para sus seres queridos, y estamos preparados para ayudarte a superarlo.
Si estás buscando orientación o tratamiento, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Nuestro equipo te ofrecerá un enfoque integral y personalizado para ayudarte a recuperar el equilibrio en tu vida. ¡Estamos aquí para acompañarte en cada paso del camino!